Iglesia Cristiana La Biblia Abierta

Nuestra comunidad cuenta con diversidad de opciones a la hora del alimentar el Espíritu, una de ellas para quienes comparten su doctrina, una de ellas es la Iglesia “La Biblia Abierta”, una asociación civil, ubicada en la calle principal de Barrancas parte alta a unos 50 metros de la calle San Sebastián y al lado de la vereda San Cayetano,

 Su Pastor, Henrry Alexis Rufiero Rodríguez esto nos dijo: ”Somos una Iglesia pues, que tiene la visión de predicar el Evangelio del Señor Jesucristo, para enseñar y traer esperanza a todas las personas del barrio de Barrancas, nuestro anhelo es que haya más personas que conozcan de la palabra de Dios, que alcancen el mensaje de salvación, entendemos que la palabra del Señor nos habla claramente de que hay un Cielo y hay un infierno, nuestro motivo es llevar ese mensaje de esperanza para que todas aquellas personas que logren escuchar y que habrá su corazón al Señor, puedan llegar también a ese conocimiento y puedan crecer y puedan adquirir la salvación. La palabra del Señor enseña en Marcos 16.16, que “EL que creyere y fuere bautizado ese será salvo”, y en Rm. 3.23, “Por cuanto todos pecaron, están destituidos de la Gloria de Dios”.

 “y entonces creemos que es necesario que el hombre se arrepienta, que conozca su condición de pecado y que venga a los pies de Cristo para ser perdonado. Y después que haga ese paso, pues, debe bautizarse para ser salvo, y vivir una vida en santidad al Señor. Reconocemos que todos fallamos, que todos somos pecadores, pero que necesitamos de ese Dios, que es un Dios de amor y que necesita que cada día se predique su palabra para darlo a conocer”.

Cuentan con: Culto los días martes de 6 a 7 de la noche, estudios Bíblicos, misma hora y la escuela dominical, que es un culto de enseñanza, de estudio de la Biblia, donde se trasmite el mensaje de salvación.

Su Fundadora, la Pastora Santa María nos cuenta: “Hace 36 años inicio con una campaña que hicimos en la calle Valera donde está un posta en la entrada para los próceres pero, no duramos sino dos días y nos sacaron o sea, un hombre vino a pelear con el predicador y nos tocó irnos para la calle los Cocos y allá terminamos la campaña (6 días de martes a domingo de 7 a 9 de la noche), una hermana nos alquiló un saloncito y hay nos seguimos reuniendo, hasta que Dios abrió puertas pudimos comprar este terreno y aquí estamos”